sábado, 19 de julio de 2008

Road to...

Pozo del Mouro, donde cae el agua de la cascada que se escucha por las noches desde el camping de Arbón.

Cuatro días de "inactividad", entrecomillado porque en realidad no paramos. Remar, caminar, nadar descubriendo los mismos rincones que de niño recorría con mis hermanos. Una pasada. Fotos aquí.

De vuelta a casa, una idea inamovible en mi cabeza: conseguir una canoa.

Pero también al llegar al hogar me esperaba una madre preocupada por su hijo. El lunes toca marchar hacia Islandia y en las tiendas no es que abunden las ropas de invierno.

- Cuando tu padre y yo estuvimos en Edimburgo, en ningún momento nos quitábamos la ropa de abrigo...¡¡pues Islandia está mucho más arriba!! ¿Cómo vas ir sólo con eso?

Esto acertó a decir cuando vió la ropa que compré para irme a Isafjordur (que está entre donde Cristo perdió la sandalia y el sitio más alejado donde haya estado Alex).
Ya sé que una madre tiene razón en un 99´9% de los casos, pero uno también tiene que hacer honor a su típica cabezonería. Aprenderé la lección a base de pulmonía.




Saludos!

1 comentario:

Manolo dijo...

La afición a la microfotografía de la rapaza suscita esperanza.¡Gracias Elías por la lección de transparencia!